lovely, you are lovely.

viernes, 13 de enero de 2012

La amada del pequeño Judas 2.

**No es necesario leer el capitulo anterior, pero si queréis click here! **
Él se había vuelto a ir, esta vez sin avisar. Sin motivo. ¿La seguiría queriendo? Quizás su amor acabó ya hace demasiado tiempo; pero ella sentía las llamas vivas dentro de ella, cómo en una hoguera dónde quemaban lo malo. <<¡Eso es! Quemaré lo que sé, lo que se me ponga por delante>>, pensó la pequeña muchacha. Y así quemó recuerdos, besos y explicaciones, razones, y porqués, quemó su rabia y se enfureció más. No. No volverás. Y lágrimas recorrían su cara como una corriente de un río demasiado salvaje y feroz.
- ¡No me he ido!- Serían imaginaciones.- ¡Ven, princesa!
Silencio. La voz sonaba tan lejana... Y la traición ya arañaba su espalda.
- ¡Baja de una vez, engreída! ¡Orgullosas! Vamos... ¡Ven!
Ella, confusa, miró hacia la ventana y vio la silueta de él. ¡No podía ser! ¡Cómo se había ido y vuelto tan pronto!
- No podía... vivir sin tí.
- Quizás conmigo tampoco. - Susurró la voz de ella, intentando tomar decisiones templadas, aunque era difícil con tanto frío.- Tenemos un pasado... y no muy bueno. 
Y nuestro pequeño Judas, cuyo nombre real desconocemos, la sonrío. Y la entregó un pequeño sobre blanco sin nombre ni dirección. Ella estaba acostumbrada a esos detalles tan raros, y no se extrañó al girar la cabeza y comprobar que había vuelto a irse. <<Volverá>>, adivinó.
Abrió el papel y leyó en silencio y sin prisas el texto del traidor al que tanto amaba:
La esencia es la misma, la misma partitura, la misma canción. Pero ya no suena igual, le cambiaron el ritmo y la melodía. Si esto ha cambiado... ¿Podemos cambiar nosotros? Si lo que creías que era negro ahora es blanco y viceversa... ¿Podemos ser lo mismos de antes con el presente que nos toca? Engaños, promesas rotas, sonrisas falsas, suspiros precipitados, sin confianza, con otras historias que contarnos... ¿Podríamos olvidarlo todo? Con opiniones distintas sobre lo que antes estábamos de acuerdo, con más lágrimas y menos ilusiones.. ¿Nos seguimos teniendo ganas? Con las palabras dichas en su día, las mentiras, y las verdades, lo que no fuimos... ¿Podríamos serlo ahora? Con las maletas vacías sin ganas de hacer ningún viaje a ningún lugar de ensueño... ¿Nos vamos en moto a la playa? Cuándo ya hemos recibido calor de otros cuerpos, y de otras palabras... ¿Conservamos ese frío que hablábamos de calmar? Preguntándonos si aquél otro la hizo sentir mejor, o si ella le dio más que tú... ¿Podríamos ser nosotros mismo? Con la esperanza vacía y la sospecha presente... ¿Me dirías buenos días, pequeña? Y antes de dormir, sabiendo que nos podríamos estar traicionando... ¿Podría desearte los dulces sueños? A pesar de asegurarnos de olvidarnos y no encontrarnos... ¿Vendrías a buscarme? Teniendo en cuenta que ya no me dan miedo las películas de terror... ¿Querrías protegerme? Sin ganas de hablar y de enfrentarnos a la verdad... ¿Volverías a mentirme? Con más experiencia y menos encanta... ¿Te seguiría encantando? Con el pelo más largo y los ojos más oscuros ¿Seguirías viendo en mí eso que tanto te gustaba? Con menos mundos en la cabeza, y más pies sobre el suelo... ¿Conseguirías hacerme reír? Con menos paranoias y más problemas.. ¿Me ayudarías? Con menos palabras bonitas y más reproches... ¿Estarías atento de mis frases? Con más decisión y más errores, con menos ojos iluminados y sonrisas permanentes, con más seguridad pero menos tiempo, con más ganas pero menos confianza, con todo lo que nos odiamos; ¿Nos podemos querer? Si tú no fueras tú, y yo no fuera yo... ¿Habría un nosotros?





2 comentarios:

  1. Wooow! es super bonito como escribes. Me gusta esta entrada, yo creo que a pesar de todo si sigue habiendo amor sigue existiendo un nosotros.

    ResponderEliminar
  2. Joder.
    Está claro que se quieren.

    Joder.
    Está claro que amo tus textos.

    ResponderEliminar